Seguro que alguna vez en vuestras vidas os habéis topado con un libro que os atrajo por su portada y, al leer la sinopsis, os convenció para descubrir la historia que cuenta. A mi me pasó esto con Mamba Negra: el clan de las serpientes y el primer libro de una saga.
Conocí a través de esta historia, a Ayshane, la legítima heredera de la Yakuza japonesa e hija del capo de la organización criminal rusa más peligrosa del país. Nos encontramos con una combinación explosiva, letal, precisa, calculadora y sensual que atrae a la vez que asusta.
Ayshane, desde pequeña recibió un entrenamiento estricto que le creó una barrera defensiva contra todo sentimiento humano. Desde su más tierna infancia carga sobre sus hombros la responsabilidad de pertenecer a las dos mafias más peligrosas jamás conocidas y eso la convierte en la persona más importante y buscada del mundo.
Todo empieza cuando en su pasado se tuerce la situación y ella se ve obligada a pedir ayuda al trío de agentes de élite que la estaban buscando desde hace años.
El trío de agentes formados por Erick, Alice y Jason no se esperan el giro que van a dar sus vidas al implicarse demasiado en el caso. Descubrirán traiciones, engaños y conspiraciones que les harán replantearse lo que creían hasta entonces como cierto. La lugarteniente oculta secretos que irá desvelando poco a poco durante la historia. ¿Conseguirá derribar el muro que envuelve sus sentimientos y abrir su corazón? Deberá hacerlo para enfrentarse a los fantasmas del pasado.
La pluma de la escritora consigue sumergirte en los recovecos de la mafia rusa y la Yakuza japonesa y, junto con las descripciones tan precisas, te hace partícipe de la historia y te permite imaginar los acontecimientos.
Suspense, amor, intriga, acción, crimen, toques eróticos y enfrentamientos sentimentales componen una mezcla perfecta para los amantes del thriller romántico que te mantiene en vilo y te hace querer saber qué pasará a continuación.
Liana Ioana Piper reseñadora en @laimaginacionnotienelimites
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