El término propósito procede del latín propositum, y se refiere a la intención o ánimo que se tiene para hacer o no hacer algo. Coloquialmente se utiliza con numerosas expresiones: nuevo propósito, propósito de año nuevo… pero la más conocida y usada es a propósito con el significado de aposta o adrede. Ese último significado lleva el matiz de que la acción o acto que se realiza a propósito es deliberada y suele afectar de forma negativa a otra persona: me hizo daño a propósito.
Otra acepción de propósito se refiere al objetivo personal o profesional de alguien, aquello que se quiere o aspira a conseguir. esta acepción se vincula al esfuerzo que debemos realizar para alcanzar dicho propósito o incluso sacrificio.
También podemos hablar de propósito como materia, es decir el tema que se está tratando en un discurso ya sea oral o escrito. Lo que está claro es que la palabra propósito tiene un alcance extratextual que excede los límites del quehacer humano. El ser humano en sí mismo vive a base de propósitos poniéndose metas nuevas cada día, mes o año. Esos propósitos son el motor de la vida y los que hacen que luchemos hasta conseguirlos o por lo menos intentarlo.
Dejar una contestacion