Pablo Picasso y la literatura

  Es indiscutible que las grandes figuras como Picasso influyen en la literatura, llegando a ser protagonistas de obras literarias completas. En el caso de nuestro pintor español fue Iván Asksionov, escritor ruso, el primero en publicar una monografía del artista titulada Picasso y alrededores en 1917. No es desconocido el interés de Picasso por la literatura en general, sobre todo por novelistas y poetas que han llegado a influirle sobre todo del período Barroco y grandes clásicos como Ovidio, Cervantes, Góngora, Balzac o Max Jacob. No llegó a escribir ninguna novela, pero tampoco le hizo falta, ya que sus obras representan con claridad su pensamiento .de vanguardia, aunque sí que ha escrito poemas, cartas y dedicatorias. La fundación que lleva su nombre publicó en 2008 Poemas en prosa, en el que se recogen los libros en prosa escritos por el artista, que nos acercan a una de sus facetas más desconocidas como escritor. En el libro también se recogen 101 composiciones en prosa de entre los más de 350 poemas que se estima que llego a escribir. Aunque su faceta literaria la desarrolló después de cumplir los 50, la literatura no fue para Picasso un pasatiempo, ya que plasmó en sus poemas los elementos presentes en su pintura además de sus obsesiones y recuerdos. Su obra está escrita a partes iguales en español y en francés, llegando a combinar ambas lenguas en alguno de sus poemas. Los escritores surrealistas de su tiempo le respetaron como poeta, compartiendo con él ese vehículo de expresión, pero que en su caso se enriquecía por la conexión directa con sus pinturas. Pero sobre todo fue inspiración para muchos escritores, como Rafael Alberti con su obra Los 8 nombres de Picasso y no digo más de lo que no digo, que recoge setenta y dos poemas escritos sobre y para Picasso. Obra que es un claro homenaje a Pablo Picasso por parte Rafael Alberti que además de reconocido poeta, también era pintor.  Como vemos la literatura se nutre en ocasiones de la pintura y la pintura de la literatura, una muestra más de la intertextualidad que hay entre las distintas disciplinas artísticas existentes.   Ana B. Villamor, Revista Galeradas