—Hola José Ramón, en la actualidad eres Psicólogo de la Asociación AMHIDA y además escritor de novela negra, ¿qué te impulsa a escribir novela juvenil?
—Hola. Quizás para desintoxicarme de tanta negrura, pero también ganas de hacer algo diferente, desafiante y relacionado con mi día a día.
—Hasta el momento has publicado dos, La triste sonrisa de M y La princesa Azul y Pepe Pan tras el misterio de la clave wifi (Libros que no muerden, 2019). Por su contenido, son novelas muy diferentes. ¿Cómo surge cada una?
—Ya tenía publicado un cuento anterior y me resultó muy divertido hacerlo. En aquella ocasión los protagonistas eran mis hijos y mi sobrina mayor, en esta tenían que ser los sobrinos pequeños que son muy divertidos y dan, no sólo para una novela si no para una saga diría yo. En cuanto a la juvenil tenía ganas de hacer algo para más mayores, futuros lectores, relacionado también con el misterio y el enigma que sobre lo que me gusta escribir. A nivel personal era un reto.
—Háblanos un poco de tu relación con la literatura negra.
—Desde siempre me ha gustado leer y ya de pequeño encontraba la mar de interesante los libros de aventuras y misterios, de ahí pasé a leer cuando era un poco mayor novelas de policías y ladrones, más adelante conocí a los autores clásicos de novela negra y me pareció fascinante, a alguno lo había intentado leer de más pequeño, pero no llegaba a entenderlo todo, cuando fui un poco mayor me adentré en ese mundillo, empecé a conocer a autores hasta que me puse a intentarlo yo también y aquí estamos.
—¿Y con la literatura juvenil? ¿Qué te aporta?
Me aporta, en un principio desconexión, me encanta leer literatura juvenil, me parece que hay una gran variedad y posibilidades en la actualidad, algunas no me gustan, pero ya es un milagro que la gente lea como para encima ponerles pegas. Yo disfruté mucho leyendo en esa época de mi vida con la literatura juvenil, creo que es una época fundamental y los gustos que ahí desarrollas, la mayoría, quedan para el resto de la vida.
—La triste sonrisa de M es una novela que trata temas contingentes y cuyo protagonista es muy especial. ¿Puedes contarles a nuestros lectores en qué consiste el TDAH?
—Es una novela cuyo prota está diagnosticado de Trastorno Déficit de atención con Hiperactividad, un desorden que fundamentalmente te pasa factura a nivel de atención y concentración, suelen despistarse mucho en su vida personal, académica y social, con lo cual les genera pequeños o en algunos casos, desajustes mayores. En la novela se ve parte de sus vivencias diarias, de las cuales tampoco se hace drama, aunque algunos casos son bastante serios, sobre todo intento que se vea como convive con ello y como lo va superando, igual, con mayor o menor dificultad.
—Y La princesa Azul…, es una novela inspirada en tus sobrinos Azul y Pepe, una narración muy divertida. ¿Cómo nace esta historia?
—Nace de la convivencia con ellos, ya que son una fuente infinita de anécdotas, y que se lo debía a ellos. La historia nace en un aperitivo del tío José, los mejores del mundo según Pepe y una pequeña indigestión que sufre Azul, a partir de ahí se combina realidad y ficción en un montón de aventuras que Pepe y Azul van solucionando con su ingenio.
—Sabemos que Azul ilustró la novela, vaya artista que tienes por sobrina. Al final del libro encontramos una simpática entrevista en la que ella nos cuenta cómo realizó los dibujos; ¿crees que es bueno para los niños participar en la creación de un libro, como lo ha hecho Azul? ¿Lo recomiendas?
—Ella lo dice en la entrevista, por momentos fue duro, no es lo mismo dibujar por inspiración propia que tener que ajustarse a unas directrices, pero creo que ha sido muy satisfactorio para ella a pesar del trabajo. En las presentaciones Azul lleva las ilustraciones y la cara de orgullo que se le ve es para enmarcar. En definitiva creo que si lo recomendaría, en mi caso ha ido de lujo y también une mucho.
—Gracias por darnos tu visión de autor.
Así que ya sabéis, lectores, no podéis dejar de echarle un ojo a esta y a La triste sonrisa M, sobre todo si ya lo conocéis en su faceta de escritor de novela negra.
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