«La sombra de la existencia» de Macoco G.M
Editorial: Macoco G.M
Nº de páginas: 426
Año de edición: 2017
Reseña de José M.
Este es uno de esos libros que me han marcado y en el que voy a pensar durante mucho tiempo. Pero para mal.
Reconozco que me dejé llevar por la sinopsis: prometía psicología (me encanta), narrativa distinta a lo habitual (estoy muy acostumbrado a la novela, así que me gusta probar cosas distintas de vez en cuando), un viaje de superación… Además, el libro era gratis para Kindle en Amazon. Así que me animé y lo bajé.
Según Goodreads, empecé este libro en septiembre del año pasado, 2017. Recuerdo que ya el comienzo me resultó lentísimo, y lo fui alternando con otros libros, dando lugar a leerme otros nueve libros de longitud media y haber empezado otro considerablemente largo, “El ojo del mundo”. En total, ocho meses para terminarlo. No me he rendido en ningún momento, pero sobre todo al principio, ponerme a leer era leer dos páginas y parar.
Para empezar, el estilo. Existe una historia con introducción, nudo y desenlace, pero la narrativa es prosa. Hay unos cuantos diálogos, pero en general nosotros “hablamos” con el narrador. Me ha parecido curioso porque no lo he visto en ningún otro libro, y es que el protagonista del “presente” (el libro empieza en el pasado) interrumpe al narrador de vez en cuando, habiendo también situaciones en las que el narrador “rompe la cuarta pared” y se dirige al lector, exhortándole a que ponga en duda su existencia, su sociedad, etc.
La historia es surrealista: Grigoriy ha roto con su pareja, de nombre P., y está aceptando su soltería. La aceptación del dolor y de su soltería lo embarca en un viaje que le lleva a ver el mundo tal y como es, a ver la auténtica realidad.
En este aspecto, viendo donde acaba la historia y donde empieza, la historia no me gusta. Aparte, me da la sensación de que dramatiza un poco la situación, al verse a sí mismo como un paria por considerar la idea de ser feliz sin depender de alguien más, por abrir los ojos en una sociedad que está ciega, según él.
“Eso sí, presentía que vivir alejado de los compromisos sociales, vivir fuera de lo que los demás presuponen que es tu felicidad, sería una tarea muy dura”
No estoy ni mucho menos negando o menospreciando los sentimientos de alguien pasando por una ruptura, pero el personaje dramatiza demasiado y se ve a sí mismo casi como un mesías de una nueva sociedad, lo que no me ha gustado. Esto no quita que haya habido frases que han dejado un eco en mi cabeza.
“(…) vida estructura sobre unos pilares inamovibles, unos pilares construidos por todos y no pensados por nadie.”
Durante el proceso de curación, Grigoriy romperá su crisálida y verá el mundo como es, embarcándose en un viaje de percepción lleno de metáforas y de simbolismo. En este aspecto, el simbolismo se me ha hecho hasta excesivo.
También es curioso el hecho de que la historia es atemporal la mayor parte del tiempo. Salvo unas pocas partes de la historia, que transcurren en el mundo real y no son una mera reflexión, toda la historia es un viaje de introspección, por lo que podría estar pasando en cualquier sitio, en cualquier época. De no ser por la mención de ciertos elementos (ambulancia, oficina, empresa), la historia encajaría perfectamente tanto en un mundo presente como en uno hace miles de años.
Al acabar la historia, nadie diría que el personaje empieza donde empezó, y la evolución es cuanto menos, rara.
En resumen, el simbolismo de toda la obra se me ha hecho excesivo. Hay demasiadas descripciones y me cuesta empatizar con el personaje dado su extremismo. Definitivamente este libro no es para mí, o no tengo la madurez lectora suficiente para apreciarlo.
VALORACIÓN: 1/5
Dejar una contestacion